There's a ghost in me, Who wants to say I'm sorry. Doesn't mean I'm sorry.

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miércoles, 24 de noviembre de 2021

Unborn Brothers & Sisters

Nunca lo sabremos, nunca.

Pero qué es lo que sienten los hermanos, las hermanas mayores como yo, como la hija mayor de mi pareja, como mi exHija Laila mayor al haber nacido y no tener ni idea de que en ésa matriz ya hubo una vida por descuido, por placer infinito, por falta de información, o bien porque no te importó at all cuidarte en las relaciones sexuales (como fue mi caso desde fines de los 80s, los 90s y hasta diría hummm 2010) con la pareja, amante, esposa del momento.

Qué sentimos aquellos que somos hermanxs mayores cuando nos enteramos que nuestrxs padres/madres por las razones que fueran en un momento histórico determinado en el pasado, han decidido abortar antes de tenernos a nosotrxs?

Some Existential Questions!

Sentimos un vacío existencial por las relaciones cercanas que nunca fueron ni serán? Sentimos que nos falta algo? Hay un fantasma biológico en nuestra psyche que nos impide ser felices? Sentimos algo al respecto aunque sea inconscientemente que puede ser más tarde trascendental en nuestras vidas? Nuestras vidas pueden o no alcanzar la plenitud por las decisiones pasadas de nuestrxs madres/padres antes que nos den a luz? Acaso nos importan los fails & flaws de nuestras madres y padres allá lejos en el tiempo?! 
Quizás jóvenes inexpertos y nada precavidos y del todo salvajes en el amor y el juego sexual de los dieci y veintis? Esa cicatriz biológica y psicológica interna de la madre nos afecta en algo nosotrxs que estuvimos in her womb durante +- 9 meses?

Mirá.

Aprendí de chico una de las poquitas máximas que me permitieron, a pesar de ser en la infancia, pre teenage, adolescencia, a los dieci, a los veintis hasta no sé: mid thirties quite wild e impulsivo, que hay que aceptar lo que no se puede cambiar*, y siempre pero siempre hay que tener la esperanza de que todo puede mejorar en el futuro inmediato. Nunca perder la fe en uno, en que el planeta se recuperará del daño humano (con o sin nosotros), que el universo escucha tanto lo bueno como lo malo que unx emite as a mortal coil, que la persona que nos acompaña siempre es la ideal hoy, mañana no lo sabremos a ciencia cierta, pero qué lindo es soñar. Y que es muy muy fácil mirar hacia atrás y visualizar los errores claramente porque ajam: con el diario del lunes somos todxs unxs genixs!


La felicidad está sobrevalorada.
Muchíssimas veces en la vida tenés que hacer un bien común por sobre lo que unx/una/uno quiere para sí mismo o para otrxs en lo inmediato ya ya. A veces te la tenés que re jugar por un bien mayor que excede a uno, a una. Y está más allá del Aquí y Ahora. Fortuna. Azar. Visión. Todo eso entra en juego. Acciones por sobre todas las cosas.

Si solo buscamos ser felices entonces hay un montón de acciones que no haremos por el bien de otras especies, por el bien de otrxs seres humanxs, por el bien del planeta porque...

Nos hace mal, nos pone triste ver la pobreza, el dolor, la humillación, la angustia, la falta de recursos, la desigualdad, la contaminación, el mal hecho carne con la crisis climática que tanto daño está haciendo a todas las especies, a todos los ecosistemas, a toda la raza humana.

La civilización está en juego no como la conocimos en los libros de historia. La civilización está en juego aquí y ahora porque el daño fue incremental. No se dió de un día para el otro sino que son siglos de daño entre nosotrxs, entre civilizaciones y entre especies. Y claro: contra el medio ambiente. La Naturaleza.

Ahora nos damos cuenta que no era el camino. Que las guerras, la contaminación, la inequidad económica basada en la religión, la cultura, el color de piel, la raza y la política, el poder, la casta, solo trajo más destrucción del ser y más abismo al planeta.

Ahora como no hay vuelta atrás, -bah! con nosotros en la ecuación, sino el planeta se recupera solito en 100 años-, está en boca de todo el mundo de qué es lo que hay que hacer en un esfuerzo mancomunado entre las naciones, sociedades, las culturas y las especies para convivir en el único planeta habitable que conocemos en la vía láctea, para poder salvarlo y así salvar a todxs sus habitantes.


Mientras tanto lxs unborn brothers & sisters nos susurran al oído del inconsciente una solución que no podemos escuchar.




*Amen to that!

jueves, 21 de junio de 2018

El Aborto

El aborto en mi vida fue algo traumático. Soy varón y así y todo, no poniendo el cuerpo en la mesa carnicera, sentís que te morís solo por el hecho de estar pasando por una situación así. Fue similar al asistir a los tres nacimientos de mis exhijos. Con similar hablo de una situación médica, femenina, que uno provocó, que uno tiene la obligación moral de acompañar y apoyar, pero el cuerpo, esa nave espacial tan única y vital, no es la de uno. Es la de un otro, una otra, una mujer valiente que también decide: no quiero transitar un embarazo ni traer hoy, aquí y ahora en estas circunstancias una persona al mundo.

Te sentís, me sentí, tan miserable de poner en esa situación a una mujer, una mujer que amás. Otras no tanto.
Sentí culpa, sentí responsabilidad, sentí terror, sentí que el mundo se te viene abajo, sentí una tonelada de mierda encima.
Te preguntás por qué el sexo libre, sin cuidados, tan sacro, tan hermoso, espiritual y humano puede terminar en situaciones de vida o muerte. Ser irresponsable es esto también. Ser promiscuo siempre acabará mal, pero claro: nunca me importaron las consecuencias. Jamás.

Pero como todo en la vida: hay que tomar decisiones, y muchas de ellas son dolorosíssimas. Por ejemplo, elegir abortar y no traer una nueva persona al mundo. No tenés una puta idea de la vida, tenés dieci/veinti y sin embargo tomas una decisión sobre otras dos vidas: la que nunca nacerá y la de la mujer que pone el cuerpo, abre sus piernas, y le sacan la vidita de encima. Una vida que nunca será. Dramático por donde lo mires. Y yo, que muy varón, me criaron mujeres, tengo una sensibilidad distinta, lo sé. En toda situación de vida o muerte en un quirófano, sentí siempre el bisturí encima.
Son decisiones que te marcan para siempre, que te foguean a full. Con algunas personas me unió a fuego por muchos años, con otras me alejó indefectiblemente.

Por cuestiones de honor hacia aquellas personas que pusieron en peligro la vida por mis decisiones, guardaré para siempre los detalles de:


  • *Si fueron embarazos deseados o no
  • *Si fueron abortos espontáneos o planificados
  • *La identidad de las personas intervinientes
  • *Las fechas y lugares exactos
  • *Qué personas de la familia estuvieron a favor y quienes en contra
  • *De dónde salió el dinero para realizar los abortos clandestinos
  • *Quienes nos ayudaron y quienes nos tiraron mierda


Pasé por cuatro situaciones de aborto en mi vida, podrían haber sido docenas de veces más. Creo que es indispensable que esté en alguno de mis blogs la sola mención de esto. Me he dado cuenta tarde, a los 44 años que no había nada online. Algo imperdonable ya que escribo todo lo que pienso y siento desde hace 14 años en Internet. Siento que no estaría contando toda la verdad. Ahora remedio esto para siempre.
La vida tiene vueltas que son absurdas a todo nivel: hoy en día me llevo re súper bien con quien podría haber sido la madre de otras dos criaturas con mi ADN y la mujer que me parió tres es una acerrima enemiga hasta mi último día. Weird!

Una última aclaración: habiendo tomado la decisión compartida, en un momento de nuestras vidas de abortar, estoy feliz de que no haya sucedido. Muy a pesar del daño hecho estos años, de la traición, de la mentira, de la falta de lealtad, muy a pesar de todo eso, soy un hombre feliz de que una persona que traje al mundo no haya sido un aborto. Siempre estaré agradecido por su vida, por su sonrisa desde el primer día, por tantos años compartidos. No me arrepiento de nada. Fue un acierto de todos modos.

Creí haberlo escrito todo pero no. Faltaba este tema tan tabú.


Como podeís apreciar: todos los abortos fueron entre mis 18 y 26 años.


Podrían ser siete descendientes pero son tres. Así lo quisimos los adultos, así lo quiso la vida y el destino que forjamos con nuestras soberanas decisiones.
Amén to that!